SANTOS DEBUTS
Ok, es complicado hablar de cosas en lo que uno tuvo cierta participación. Para Santos edité el libro de arte, publicado por Norma/España (si, la misma editorial de los álbumes de comic y de DC/Vertigo), que saldrá en la madre patria el 10 de Octubre. También soy co-autor de la idea original y de los conceptos iniciales de la historia (como verán en los créditos), por lo mismo hay nervios indirectos involucrados en el estreno del film, de mi amigo personal y vecino (con López y Miguel Asensio vivimos en un radio de 70 metros). Pero las cosas están resultando, tal cual nos anticipo una sicóloga con poderes (no es chiste). Película más innovadora y vanguardista del Fantastic Film Festival de Austin, eso es great... Copy pasteo algunas de las primeras opiniones, el resdto leanlo en Dobleverso.
Me divertí mucho con Santos. Es una delicada sátira...
Los efectos son contundentes y el contenido humano, a pesar de lo gracioso de la realización, es emocionante. Nicolás López es un cineasta nato, con un real talento cinematografico”
Alejandro Jodorowsky
“SANTOS es hermosa, única...
grotesca, hilarante y tiene mas 14 niveles de imagenes, ideas y escenas con la que te reiras mientras niegas con la cabeza.”
Harry Knowles, Aint It Cool News.
Y aca va un extracto de la mega-critica-comentario-analisis-paja-mental de Jordi Costa.
Lo confieso: yo fui uno...
de los críticos españoles que, en su momento, no fueron seducidos por “Promedio rojo”. Me alegro de que, en su día, no tuviese oportunidad de escribir sobre ella, porque, ahora, me vería obligado a volver sobre mis palabras. En su momento, creí detectar en la opera prima estados carenciales de carisma, arritmias y quizás algún síntoma de artrosis narrativa. “Santos”, su segunda película, descorrió el velo: Nicolás López, aunque él quizás no sea consciente de ello, ha abierto un nuevo capítulo en esa larga y tortuosa historia del superhéroe como mito versátil y, en una pirueta insólita, ha logrado cerrar un círculo en medio de esa zona muerta que separaba la anti-épica moderna de la presunta épica súperheroica. En sus manos, el superhéroe se convierte en material idóneo para la auto-ficción: “Promedio rojo” y “Santos” funcionan, en buena medida, como la versión en borrador y la caligrafía pasada a limpio de la autobiografía de un hombre ridículo que se sueña hipérbole en un universo donde las estéticas del anime, el comic-book y el karaoke confluyen en la sublimación de un sueño romántico de auto-afirmación y conquista íntima (y sentimental). López no desatiende ni el factor Siegel & Shuster, ni el factor Stan Lee, ni el factor Alan Moore, ni el factor Millar. Por si fuera poco, lo completa con razonables dosis de esa Mística Shyamalan, cuyas mayores iluminaciones son, esencialmente, dos:
a) que el comic-book de superhéroes es la forma pop de una mitología fundacional sobre la Luz y la Sombra,
b) que el superhéroe es, en el fondo, la creación del súpervillano: el espejo inverso que le otorga su sentido.
Desde el culo del mundo, pues, López ha conquistado la certidumbre de que, aunque vivimos en un mundo diseñado y dominado por los súpervillanos, en algún rincón de un hombre ridículo (receptáculo de un Niño Bola con el pijama forradito de moscas) late la posibilidad de la redención final. O, por lo menos, eso es lo que nos conviene creer para no volvernos locos.
Ok, un poco de ego no le hace mal a nadie
Los efectos son contundentes y el contenido humano, a pesar de lo gracioso de la realización, es emocionante. Nicolás López es un cineasta nato, con un real talento cinematografico”
Alejandro Jodorowsky
“SANTOS es hermosa, única...
grotesca, hilarante y tiene mas 14 niveles de imagenes, ideas y escenas con la que te reiras mientras niegas con la cabeza.”
Harry Knowles, Aint It Cool News.
Y aca va un extracto de la mega-critica-comentario-analisis-paja-mental de Jordi Costa.
Lo confieso: yo fui uno...
de los críticos españoles que, en su momento, no fueron seducidos por “Promedio rojo”. Me alegro de que, en su día, no tuviese oportunidad de escribir sobre ella, porque, ahora, me vería obligado a volver sobre mis palabras. En su momento, creí detectar en la opera prima estados carenciales de carisma, arritmias y quizás algún síntoma de artrosis narrativa. “Santos”, su segunda película, descorrió el velo: Nicolás López, aunque él quizás no sea consciente de ello, ha abierto un nuevo capítulo en esa larga y tortuosa historia del superhéroe como mito versátil y, en una pirueta insólita, ha logrado cerrar un círculo en medio de esa zona muerta que separaba la anti-épica moderna de la presunta épica súperheroica. En sus manos, el superhéroe se convierte en material idóneo para la auto-ficción: “Promedio rojo” y “Santos” funcionan, en buena medida, como la versión en borrador y la caligrafía pasada a limpio de la autobiografía de un hombre ridículo que se sueña hipérbole en un universo donde las estéticas del anime, el comic-book y el karaoke confluyen en la sublimación de un sueño romántico de auto-afirmación y conquista íntima (y sentimental). López no desatiende ni el factor Siegel & Shuster, ni el factor Stan Lee, ni el factor Alan Moore, ni el factor Millar. Por si fuera poco, lo completa con razonables dosis de esa Mística Shyamalan, cuyas mayores iluminaciones son, esencialmente, dos:
a) que el comic-book de superhéroes es la forma pop de una mitología fundacional sobre la Luz y la Sombra,
b) que el superhéroe es, en el fondo, la creación del súpervillano: el espejo inverso que le otorga su sentido.
Desde el culo del mundo, pues, López ha conquistado la certidumbre de que, aunque vivimos en un mundo diseñado y dominado por los súpervillanos, en algún rincón de un hombre ridículo (receptáculo de un Niño Bola con el pijama forradito de moscas) late la posibilidad de la redención final. O, por lo menos, eso es lo que nos conviene creer para no volvernos locos.
Ok, un poco de ego no le hace mal a nadie
Etiquetas: Amigos, Blogs aliados, Cine, Ego
1 Comentarios:
Congrats, Ortega!
Bring on the sequel!
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