EL RETORNO DEL KING
De todas las columnas que he escrito en Fuera de Foco, ésta es lejos la que más sentí cortar, pero bueno, traté de dejar lo básico (no era necesaria la distinción entre "Noche" y "Hora del Vampiro"), las ideas centrales, pero igual hubo frases que me gustaban y que debí volar. Como siempre agradezco sus comentarios freak en los blog mercuriales. Acá, la versión uncut, dedicada a los Kingfans.
DIOS SALVE AL KING
1982, tengo 6 años y estoy frente al televisor. Anuncian el estreno del domingo, la película se llama La Noche del Vampiro: noche, neblina y de pronto, entre los vapores, un niño flotando, tiene los ojos blancos y una sonrisa endemoniada. Se acabó todo, esa noche no pude dormir, ni la siguiente, ni la subsiguiente. Y para empeorar las cosas no era un filme, sino una miniserie de tres partes, así que durante casi un mes tendría que esconderme de cada “próximo domingo”. Al final me las di de valiente y me atreví a ver el avance del último capítulo, gran error: una sábana negra tirada en medio de un comedor, de pronto esta se levantaba y aparecía un ser calvo, de colmillos afilados y piel verde. ¡Casi me da un infarto! Volvieron a repetir la miniserie al año siguiente y de nuevo fui un cobarde. Curioso, en las mismas fechas se estrenó en cines una película con nombre parecido: La Hora del Vampiro. Unos amigos la vieron, tenían hermanos mayores, y quienes habían visto la serie no entendían nada, “era lo mismo de la tele, pero le habían sacado partes”. Corte.
Ocho años después me regalaron un libro para navidad, se llamaba La Niebla y era de un tal Stephen King. Tres relatos, el primero una novela corta acerca de un grupo de gentes encerradas en un supermercado, rodeados de una espesa niebla habitada por aterradoras criaturas. Me lo devoré entero, incluida la solapa, donde entre las “otras obras del autor” aparecía La Hora del Vampiro. Me tardé en conseguir el libro, Salem´s Lot era su nombre original, también el de la miniserie dirigida por Tobe Hooper (Poltergeist) cuya versión televisiva fue nombrada acá como La Noche del Vampiro mientras que su recorte para el cine (con 60 minutos menos) usó La Hora del Vampiro, ¿dos nombres para la misma historia? En rigor tres, porque en España (y ahora en DVD zona 4) se llamó Phantasma II para colgarla del éxito de un filme de horror italiano llamado Phantasma. Charquicán imposible, da lo mismo, lo que importa es el miedo. Y eso sigue intacto.
Aterradora sincronía: el próximo jueves, días previos al cumpleaños 61 del autor de Maine, se estrena en Chile (con un año de atraso) La Niebla, de Frank Darabont, quien ya supo llevar al escritor a pantalla con Sueños de Fuga y La Milla Verde. Más que una película, un ritual, porque los devotos de King lo tenemos claro, cada año tenemos algo suyo, el 2008 empezó con 1408, siguió con La Niebla y se estirará hacia fines de año con la traducción de su última novela, Duma Key y la llegada del tomo recopilatorio del cómic La Torre Oscura, misma saga que J.J.Abrams anunció convertir en serie para el 2010. Es el toque del rey, una cancha donde nadie lo supera. Literatura hamburguesa, es verdad, pero también los es que las hamburguesas a veces son harto más ricas que un buen filete. Con perdón, pero entre leerme el último mamotreto de Richard Ford y disfrutar un buen King me quedó lejos con lo último. La historia le hará justicia, apuesto mi nombre y mis pocos bienes a que para el 2030, It (su mejor obra) estará a la misma altura que Moby Dick y el viejo King a la par que Mark Twain o William Faulkner.
Miedos, temores, pop, rock, cine, fantasmas sobrenaturales y morales, el cóctel King es amplio. Carrie y Christine por un lado, Misery y Cuenta Conmigo por el otro. Entre medio El Cazador de Sueños, La Zona Muerta y El Replandor, esta última brillando de la mano de otro SK, Stanley/Stephen Kubrick/King, la simetría da tanto miedo como su contenido.
Como Woody Allen, el buen Stephen es bueno hasta en sus malas historias. Larga vida al King, si me preguntan podría llenar páginas y páginas de uno de mis autores favoritos, porque no nos veamos la suerte entre gitanos, King no es un placer culpable, todo lo contrario, es un gusto mayúsculo. Más de uno de ustedes, de seguro también tienen un King favorito, el mío es Salem´s Lot (o La Noche/La Hora del Vampiro), ¿el de ustedes será Cujo, The Runing Man, Apt Pupil, Dolores Claiborne…?)
DIOS SALVE AL KING
1982, tengo 6 años y estoy frente al televisor. Anuncian el estreno del domingo, la película se llama La Noche del Vampiro: noche, neblina y de pronto, entre los vapores, un niño flotando, tiene los ojos blancos y una sonrisa endemoniada. Se acabó todo, esa noche no pude dormir, ni la siguiente, ni la subsiguiente. Y para empeorar las cosas no era un filme, sino una miniserie de tres partes, así que durante casi un mes tendría que esconderme de cada “próximo domingo”. Al final me las di de valiente y me atreví a ver el avance del último capítulo, gran error: una sábana negra tirada en medio de un comedor, de pronto esta se levantaba y aparecía un ser calvo, de colmillos afilados y piel verde. ¡Casi me da un infarto! Volvieron a repetir la miniserie al año siguiente y de nuevo fui un cobarde. Curioso, en las mismas fechas se estrenó en cines una película con nombre parecido: La Hora del Vampiro. Unos amigos la vieron, tenían hermanos mayores, y quienes habían visto la serie no entendían nada, “era lo mismo de la tele, pero le habían sacado partes”. Corte.
Ocho años después me regalaron un libro para navidad, se llamaba La Niebla y era de un tal Stephen King. Tres relatos, el primero una novela corta acerca de un grupo de gentes encerradas en un supermercado, rodeados de una espesa niebla habitada por aterradoras criaturas. Me lo devoré entero, incluida la solapa, donde entre las “otras obras del autor” aparecía La Hora del Vampiro. Me tardé en conseguir el libro, Salem´s Lot era su nombre original, también el de la miniserie dirigida por Tobe Hooper (Poltergeist) cuya versión televisiva fue nombrada acá como La Noche del Vampiro mientras que su recorte para el cine (con 60 minutos menos) usó La Hora del Vampiro, ¿dos nombres para la misma historia? En rigor tres, porque en España (y ahora en DVD zona 4) se llamó Phantasma II para colgarla del éxito de un filme de horror italiano llamado Phantasma. Charquicán imposible, da lo mismo, lo que importa es el miedo. Y eso sigue intacto.
Aterradora sincronía: el próximo jueves, días previos al cumpleaños 61 del autor de Maine, se estrena en Chile (con un año de atraso) La Niebla, de Frank Darabont, quien ya supo llevar al escritor a pantalla con Sueños de Fuga y La Milla Verde. Más que una película, un ritual, porque los devotos de King lo tenemos claro, cada año tenemos algo suyo, el 2008 empezó con 1408, siguió con La Niebla y se estirará hacia fines de año con la traducción de su última novela, Duma Key y la llegada del tomo recopilatorio del cómic La Torre Oscura, misma saga que J.J.Abrams anunció convertir en serie para el 2010. Es el toque del rey, una cancha donde nadie lo supera. Literatura hamburguesa, es verdad, pero también los es que las hamburguesas a veces son harto más ricas que un buen filete. Con perdón, pero entre leerme el último mamotreto de Richard Ford y disfrutar un buen King me quedó lejos con lo último. La historia le hará justicia, apuesto mi nombre y mis pocos bienes a que para el 2030, It (su mejor obra) estará a la misma altura que Moby Dick y el viejo King a la par que Mark Twain o William Faulkner.
Miedos, temores, pop, rock, cine, fantasmas sobrenaturales y morales, el cóctel King es amplio. Carrie y Christine por un lado, Misery y Cuenta Conmigo por el otro. Entre medio El Cazador de Sueños, La Zona Muerta y El Replandor, esta última brillando de la mano de otro SK, Stanley/Stephen Kubrick/King, la simetría da tanto miedo como su contenido.
Como Woody Allen, el buen Stephen es bueno hasta en sus malas historias. Larga vida al King, si me preguntan podría llenar páginas y páginas de uno de mis autores favoritos, porque no nos veamos la suerte entre gitanos, King no es un placer culpable, todo lo contrario, es un gusto mayúsculo. Más de uno de ustedes, de seguro también tienen un King favorito, el mío es Salem´s Lot (o La Noche/La Hora del Vampiro), ¿el de ustedes será Cujo, The Runing Man, Apt Pupil, Dolores Claiborne…?)
Etiquetas: Artículos propios, Cine, Escritores, Fuera de Foco
4 Comentarios:
¿No habían hecho otro remake de La Niebla? ¿Uno donde salió el actor de Smallville?
es de The Fog, la de Carpenter. Este es The Mist. En rigor esta seria LA Niebla, la otra La Neblina
Buen artículo Ortega, dan ganas de leer a King. Debo reconocer que nunca he leído un libro suyo, sí he visto un montón de sus adaptaciones, desde IT, hasta la Niebla, Cuenta conmigo, El Resplandor, Misery, Carrie, Christine y no sé cuántas más. Como no he leído un sólo libro de él me da lata pensar que se me hará fome al tener ya a King en el inconsciente más por sus películas que por sus libros. Hay que darle una oportunidad, lo sé.
Vi hace unos meses The Mist (gracias a la mula), es buena, con un final que te deja para adentro. Los efectos especiales son bien dispares, unos están bien elaborados y otros realmente chapuceros. Eso hace pensar que la hicieron para su estreno solo en DVD.
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