FORTEGAVERSO: APOCALIPSIS MAÑANA

jueves, octubre 19, 2006

APOCALIPSIS MAÑANA

Quizás el DVD del año. Al menos eso intenté justificar en la última edición de Rolling Stone

EL HORROR… EL HORROR COMPLETO…

La anticipada edición de colección de la obra maestra de Francis Ford Coppola encabeza la lista para el DVD DEL AÑO. Un box set que habría sido perfecto si el paquete hubiese incluido Heart of Darkness, el ya mítico documental de la filmación de esta epopeya.

Apocalipse Now: The Complete Dossier (Confidencial Edicion)
4 Estrellas ½


Corría 1978 y los ejecutivos de la Paramount estaban desesperados. Coppola llevaba casi un año perdido en las Filipinas, rodando una película que devoraba miles de dólares por hora. El director de El Padrino había prometido una película que no sería sobre Vietnam, sino que SERÍA Vietnam, adaptando la conocida novela de Joseph Conrad, El Corazón de las Tinieblas, a lo sucedido en el sudeste asiático menos de una década antes. Pero el estudio no había visto nada y el proyecto engullía dinero como un leviatán de proporciones bíblicas. Preocupados, convocaron a John Milius, guionista del combo y le pidieron que viajara a Manila y que intentara convencer a Coppola de bajar los costos, de lo contrario el estudio abortaría el proyecto. Milius se trasladó junto a un productor ejecutivo y tras desembarcar en la capital Filipina se dirigieron a las selvas del país, donde encontraron con el caos absoluto. Coppola sumido en las drogas, la mitad del equipo enfermo y el ejército del país que los acogía amenazándolos con mandarlos al otro mundo. Horror… the full horror, como sentencia uno de los personajes en la cinta. Coppola escuchó la propuesta de Milius y su asociado y a modo de respuesta accedió a mostrarles cerca de dos horas de metraje. Ruido blanco. Diez días después Milius regresó a Los Angeles y convocó a los ejecutivos en las oficinas de Paramount. “Y”, le preguntaron ellos. “Déjenlo tranquilo”, comenzó Milius, “que termine de rodar. Apocalipse Now, no sólo ganará el Oscar, se convertirá en la primera película en ganar el premio Nóbel”.
Al final, aunque la película ganó Cannes y otros festivales, el Oscar le fue más bien esquivo, otorgándole sólo dos galardones. El de mejor sonido y mejor fotografía, este último por el espléndido trabajo de Vittorio Storaro. El trofeo al mejor filme del 79 fue para Kramer v/s Kramer en lo que hasta el día de hoy se considera uno de los grandes errores de la academia. El Nóbel, vaticinado por Milius, quedaría guardado en el baúl de las buenas anécdotas, perfectas para comenzar un artículo sobre la película.
Apocalipse Now es tal vez la más colosal película de viaje que se filmado. Viaje entendido como misión, como buscar un objetivo para destruirlo o conseguirlo. En este sentido, tal como la novela de Conrad que inspiró el relato, puede asociarse con Moby Dick de Mellville, la película de Coppola funciona como un correlato a esos otros dos trayectos epopéyicos que en pantalla grande nos mostraron Kubrick en 2001 y Jackson en la trilogía de El Señor de los Anillos. La presencia fantasmal del coronel Kurtz (Marlon Brando) cuya mera existencia es prácticamente un arquetipo del bien y el mal es perfectamente equiparable al monolito que flota entre las lunas de Júpiter o el anillo único de Sauron. Willard (Martin Sheen) es en esta lectura hermano del astronauta Bowman y de Frodo Baggins. Es que la cantidad de lecturas que pueden hacérsele a esta perturbadora visión de Vietnam supera por mucho el número de caracteres disponibles en esta página. Apocalipse Now es un viaje, una misión, pero también un descenso a lo infiernos. La selva donde Kurtz ha levantado su culto orgiástico es el más interno de los círculos del infierno. No en vano el tratamiento que Brando le dio a su personaje estuvo a medias tintas entre lo bello y lo perverso, entre lo grotesco y lo sublime, como el Lucifer bíblico según El Paraíso Perdido de Milton.
Estrenada en 1979, la película tuvo un reestreno mundial el 2001 con una versión extendida con más de una hora de metraje. El nuevo corte fue... lee el resto en Rolling Stone. Noviembre, 2006.