SE ARRIENDA... DESDE PERU

Fue bonito leerla. A más de un añode su estreno, se leyó y se sintió bien. Con todos sus aciertos y fallas, SA es de las cosas que más me siento orgulloso. El link de la nota aquí.

SE ARRIENDA

15 años, el músico Gastón Fernández se plantaba frente a un futuro brillante junto a su grupo de amigos, soñadores e idealistas, entre ellos su socio Julián Balbo, y su novia Cordelia. Quince años después, el destino y las opciones de vida los han separado. El país ha cambiado. Mientras Cordelia, Balbo y muchos de sus amigos disfrutan del éxito y del "nuevo Chile", Gastón se encuentra frustrado ante el éxito artístico que nunca llegó. Aprenderá a enfrentar las primeras decisiones profundas y una que otra desilusión: elegir entre continuar esperando un porvenir artístico, sumido en la pobreza, o transar, trabajando en la corredora de propiedades de su padre. La aparición de Elisa, una encantadora y sorprendente joven y Pancho, un intenso joven con una historia sorprendente, le enseñaran a Gastón que la vida no es tan dura como parece.

"Se Arrienda" es , sin lugar a dudas, un cine vanguardista de propuesta, sumergido en el juego de imágenes y sensaciones que trasladan al espectador a diferentes planos de la existencialidad humana. La óptica exige poner mucha atención en la trama de su protagonista principal, el joven Gastón Fernández (Luciano Cruz-Coke). Gastón es un músico, un compositor que vive aislado en su mundo de ideas. Presume estar en un ámbito al que realmente no pertenece. Es una paradoja de las etapas que se viven de la pubertad a la adolescencia. Esa es una de las valías del filme, ya que nos hace recordar las transiciones que vivimos de adolescentes. Sueños soñados con la pasión propia de todo soñador. Gastón deberá enfrentar, sin embargo, el mundo real al cual siempre ha huido. Le pesa el tener que trabajar para la empresa de su padre arrendando departamentos a cambio de una comisión.

Dentro de "Se Arrienda" se encuentra inserto otro mini-filme, "las hormigas asesinas", que no es sino otra metáfora inserta en dicha paradoja, reflejando parte del aislamiento del personaje central que resiente la soledad, la falta de una pareja, de un amor que le brinde un apoyo, un estímulo, un calor humano que le haga recordar y reafirmar precisamente eso: su condición humana de hombre.

Pero para ello el niño deberá transformarse precisamente e eso: en un hombre. Eso es parte de otro dilema y, claro está, otra de las temáticas del filme, un filme que si bien es cierto explora y plantea diversas etapas existencialistas vistas desde la particular interioridad de quien vive aislado en su propio mundo, también es cierto que ha levantado polémicas y debates para quienes deseaban ver, acaso tal vez, un cine más de corte, llamémosle…humm….convencional; ese que se apega a la línea del plano aristotélico (instaurado precisamente por el sabio griego Aristóteles: Inicio-Desarrollo-Climax-Desenlace-Final) y que tanto exigen los radicales críticos conservadores tradicionalistas del cine, el teatro o la literatura….y, ¡hay de aquel que se atreva a no apegarse a los cánones impuestos de semejante escolástica contemporánea!. Sí, si no te apegas a sus moldes estereotipados, entonces estás fuera de la jugada: te sancionan, censuran y hasta te expulsan de sus clubes de "intelectuales y letrados". Lo mismo pasa entre ciertos sectores de jóvenes creadores que, si no tienes la visión "iluminada de los elegidos" y si no comulgas con ellos en sus mismas misas…igual estás fuera.

Tales son los muchos méritos de Alberto Fuguet, director del filme. Otra de las muchas caraterísticas del filme es que refleja parte del modus vivendi, del caló y color en modismos de muchos chilenos. A través de sus diálogos el cineasta nos invita a dar un recorrido entre sus calles y sus costumbres. Construcciones, callejones, parques y departamentos vacíos a la espera de almas que las habiten.

Gastón finalmente evoluciona en las etapas que afronta y es así como dos seres le bipolarizarán su particular cosmogonía de la vida: Elisa, quien le enseñará que el amor es mucho más de lo que él había pensado conocer. Elisa le enseñará que la total aceptación, tolerancia, madurez , comprensión y comunicación son pilares fundamentales en la vida de quienes aman. Y el joven Pancho, quien le hará entender que hay almas que han atravesado peores infiernos que los que él había creído vivir. Traumas que sí te marcan en lo más profundo del alma.

Y así, quien, desde el inicio de un aparente filme obscuro, pesado, denso y monótono con un Gastón que te hará recordar un poco, más o menos al célebre personaje de Pink, aquel central de la película "Pink Floyd, The Wall" de finales de los 70´s. De pronto, ese aislado y deprimido Gastón de pronto, como si se quitara la venda de los ojos, o emulando tal vez al célebre Segismundo de la clásica obra teatral "La vida es Sueño"(Calderón de la Barca) que reacciona al mundo y sus convencionalismos sociales al escapar de la torre de donde fue ocultado por su padre desde niño; igual este Gastón re plantea su existencialidad de una forma asombrosa, dejando en los espectadores un profundo mensaje.

En suma, "Se arrienda" es un filme de propuesta vanguardista muy recomendable para quienes exigen otra óptica distinta al cine al que están acostumbrados a ver.