MALDITO POP NO DIGAS QUE NO SIENTES NADASoy un tonto viejo que se enamoró hasta las patas de una pendeja de 25 años... Hoy es un día triste y feliz al mismo tiempo. Suerte Victoria Z, te va a ir increíble en tus nuevos rumbos. Y yo cada tarde te voy a estar esperando con una tacita de te y un pan pita con jamon de pavo. Te amo. En fin. Tenia que decirlo. Pasando a lo nuestro, este fue un artículo acerca de malas buenas canciones que alguna vez firmé con Marcelo Contreras para la Zona. Grande Marcelo.El reportaje fue publicado originalmente el viernes 14 de Julio del 2000, en la Zona de Contacto.Puro popLa música pop, esa bien pop, fabricada por productores y armada para pegar, es como un combo del McDonalds. Hace mal, pero nos encanta. Enferma, pero es delicioso. Es digerible, pero repite. Y aunque nos duela la guata la volvemos a comer. ¿Qué maldita fuerza nos hace adictos a una canción hasta el cansancio? No sabemos, pero salimos a preguntar.
Ocurre. La situación es como la de Bill Murray en Hechizo del tiempo, pero sin la parte en que se repiten los días de por medio. Siete de la mañana. Los números digitales de la radio reloj que está encima de tu velador llegan a cero. La radio se prende y ahí está, copando tus oídos matinales: "Maldito amor, no digas que no sientes nada...", Supernova, el nuevo placer culpable de la música popular chilena. Porque digan lo que digan, el segundo single es perfecto. No porque sea una obra de arte seamos sinceros, este trío de colegialas no son ni los Beatles ni David Bowie sino porque su "Maldito amor" se pega, se enrolla como un chicle de fruta al interior de tu cabeza y gatilla, quién sabe... una neurona determinada que te obliga a repetir la canción una y otra vez. Desde las ocho de la mañana a las once de la noche. A cantarla en voz alta y a meterla ni siquiera a la fuerza como un virus melódico en la mente y voz del que está sentado al lado tuyo.
El virus se llama música pop. Que lo inventaron los Beatles, que esto es rock y esto es pop, eso acá no le importa a nadie. Porque el pop no tiene nada de teórico, es una cuestión de sangre, de memoria. Una conjunción de placeres culpables que caen y se quedan por obra y gracia de tipos como Stock, Waterman y Aitken (ingleses responsables de engendros que van desde Rick Astley hasta Take That), que tienen el don de saberte contagiar con la melodía precisa y la letra justa en el momento adecuado. El pop del bueno, el pop efectivo, es como una rémora, algo que nada pegado a tu espalda. El mal pop, en tanto, se olvida y queda enredado en el tiempo.
Es por eso que, más que teorías y respuestas, tratamos de buscar por lo menos un par de razones para descubrir las fuerzas que mueven el pop. Juntamos a 14 personas y les preguntamos: ¿qué hace que una canción pop se te quede pegada en la cabeza? Estas fueron las respuestas:
Es la fórmula...
"Un tema de pop perfecto debe ser nítido, fácil de digerir a la primera, pegajoso. O sea, que suene a nuevo, pero que el estribillo te gatille algo que tienes por legado casi genético. La canción debe ser moderna y sobretodo sexy. Despertarte calentura, amor y erotismo. En este sentido, por ejemplo, Christina Aguilera es mucho más pop que Britney Spears: por lo sexy. La clave del pop es seducir y ser rápido. Ser desechable, pero dejar un buen sabor de boca. Además tiene mucho que ver con el caracter publicitario, pero sin fines propagandísticos sino que estilísticos" (Pablo Castro, diseñador, director de arte de Zegers DDB).
"Las buenas canciones pop tienen que ser como un bostezo. Las escuchas y automáticamente se te quedan. Son como una enfermedad y yo creo que la clave de la enfermedad está en el coro" (Jorge Olguín, director de la película "Angel Negro").
"Una canción pop debe estar basada en una buena melodía más que en una formación armónica atractiva. Técnicamente es algo bastante simple: un tono, la tercera mayor, te hace sentir feliz; y una tercera menor, melancólico y triste" (Ignacio Olivares, crítico de música en revista Qué Pasa).
"Es la rima. Es súper importante la rima en una canción pop" (Claudio Torres, músico de Maestro).
"Obviamente debe ser melódica. También el estribillo y la letra debe ser interesante para que la puedas repetir y acordarte" (Roberto Denegri, disquería Musicland).
"No hay pautas comunes para la música pop. Creo que en la actualidad el buen pop no puede darse el lujo del mal sonido. Ahí está la mitad de un canción pop. También debe tener cierta cuota de representatividad del interés del grupo al que está dirigido. Creo que en el pop el intelecto es de los productores, pero el talento es del artista" (Cristián Heyne, coproductor musical de Supernova).
"Para mí son canciones tramposas. En el fondo son malas. Apelan a, cómo decirlo en castellano, un ritmo básico" (Hernán Rodríguez, programador y escritor de radioislanegra.com).
"Primero, es el ritmo: ya lo decía Miles Davis, "lo que me gusta de rap es el ritmo machacante, lo escucho una vez y cuando voy de vuelta a casa, aún no me lo puedo sacar de la cabeza. Y además, está la melodía: la armonía, lo tonal, lo que fluye, llama de inmediato la atención del oído sin molestar, y por el contrario, agrada. Eso se queda, es fácil de recordar porque el cerebro lo relaciona con algo placentero y uno siempre quiere repetir esos momentos" (Rodrigo Díaz, ex responsable del programa "Devórame otra vez" de radio R&P y de "Retrovisor" de canal 2; productor de videoclips).
"Para mí tiene que ver con elementos identificables en términos corpóreos. Tiene que tener estómago, que te haga mover, con groove. Que tenga cabeza, para que la letra te diga algo. Y que tenga corazón, para que le creas. Creo que todos los clásicos tienen esos elementos" (Gaspar Domínguez, director artístico sello EMI).
Son las temáticas y las letras...
"Hay canciones con coro hecho para eso, como las de Thalía, con estructura simple, repite la misma palabra con energía. No creo en esa fórmula, porque hay otras que se te quedan y no hay explicación para eso. Un buen ejemplo es Come as you are de Nirvana, y algunas de Michael Jackson. Es inexplicable en algunos casos, pero en otros la palabra te atormenta" (Koko Stambuk, líder de Glup!, coproductor de Supernova).
"Los coros pegajosos están llenos de clichés, son simples y hasta cursis. Es como si cantando te atrevieras a decir lo que hablando te parecería ridículo" (Alfredo Da-Venezia, miembro del grupo editor de Da-Da.cl, manager de Weichafe).
"La letra es cebollenta o épica. Un tema pop que marca es el que tiene la capacidad instantánea para convertirse en soundtrack de nuestras ordinarias vidas. Se te pegan porque de alguna forma gatillan tu sensibilidad más popular" (Sergio Cancino, periodista y conductor de "Abre los ojos" y "Música para ver", radio Tiempo).
"No sé de música, pero supongo que el estribillo debe estar armado de tal forma que se convierte en el leit motiv de un día, de un estado de ánimo, de un montón de cosas. Las buenas canciones pop son de plástico, como un juguete, por eso se quedan" (Jorge Olguín).
"Es una cuestión de filosofía y ganas de querer ser abiertamente pop. Popular en el sentido grande y plástico de la palabra, que es como uso. De hecho, un gran tema pop es el que siempre quiere matar. El pop también tiene la virtud que a pesar de ser abiertamente comercial es algo innovador. Siempre es algo nuevo, agarra lo que está en el aire y lo procesa" (Claudio Torres).
"El pop es la muestra más clara de que un productor con gente con ganas pueden tocar el cielo o, lo que es peor, que cualquier mono se convierte en estrella. Aunque sea por un minuto, en el pop eso da lo mismo" (Sergio Cancino)
"No sé, no creo que tengan nada mágico o que tengan que tener algo. Para mí la gracia del pop es que está hecho para enganchar a la primera escucha. Es una cuestión de un montón de criterios, entre artísticos y comerciales que se juntan y hacen un tema pegajoso. El pop habla de pop, de cosas simples, como el amor y la vida. Y es rápido, digerible, como una hamburguesa" (Javiera Torres, artista visual).
Es la oportunidad en que aparece...
"Es una combinación de melodía-oportunismo-estado de animo-calidad lírica (en caso de entenderla) y hasta en una segunda lectura, la propuesta estética de los intérpretes" (Jaime Baeza, conductor de "Perdidos en el espacio", radio Universidad de Chile).
"El primer compositor pop fue Mozart, un artífice de melodías comercialmente efectivas y evocativas. Pero, sin duda, Brian Wilson es el compositor pop más inspirado de todos los tiempos" (Ignacio Olivares).
"Un tema bien hecho, armonioso, con ritmo, puede ser un fracaso comercial o no lograr el éxito esperado debido a que no se encuentra en sincronía con su tiempo. El ejemplo más reciente es Nirvana. Cobain no inventó nada, pero el estilo expresado desde 1987 por Pixies generó una explosión pop cuando la generación se sintió identificada con las letras a voz en cuello gritadas por Cobain. Otro ejemplo es el invento de la onda disco, que se le atribuye a Giorgio Moroder, cuando en 1974 hizo grabar Love me, love me, baby a Donna Summer en Alemania. Pero fueron los Bee Gees quienes lograron capitalizar con mayor éxito (Fever night) esa moda, siendo una banda que tenía una orientación original más cercana a la balada. En términos sociológicos, se puede argumentar que el Disco es la expresión alienante y promiscua del trauma vivido por las capas sociales de EE.UU. luego de Vietnam. Algo que todos querían olvidar y para eso qué mejor que irse de fiesta. ¿Otro ejemplo? Elvis. Elvis se hizo famoso cuando grabó Houng dog en 1956. Un poco antes ya había grabado Heartbreak hotel, un blues con cierta aceptación de ranking. Pero cuando grabó Houng dog, canción que Stoller y Lieber habían hecho para Big Mamma Thornton un año antes, la fiebre explotó. La versión original casi no tuvo éxito pero Elvis la convirtió en número uno y fue ungido como Rey del Rock & Roll. Antes estaban Chuck Berry (negro) y Bill Haley (viejo), pero Elvis capitalizó el fervor, fue el primer blanco joven en tomar este ritmo y hacerlo suyo. Y no hay nada más pop que eso" (Rodrigo Díaz).